Entrevista

 

La imagen multicultural de Norma Patiño

2019-01-14 07:19:28

La fotógrafa encontró por su viaje a la India una violencia de género que le pareció aterradora

 

 

 

Por Norma Salazar*

 

Norma Patiño Navarro. Mexicana. Licenciada en Diseño Gráfico por la Escuela Nacional de Artes Plásticas, ahora Facultad de Artes de Diseño de la Universidad Nacional Autónoma de México, maestra en Historiografía por la Universidad Autónoma Metropolitana, campus Azcapotzalco. Estudió fotografía y fotorreportaje, foto fija, iluminación, cine, video en la Universidad del Claustro de Sor Juana y otros centros, cursó el doctorado en Estudios Urbanos, «Violencia, fotografía y ciudad» en la Universidad Autónoma Metropolitana sede Azcapotzalco.

Académica, investigadora y fotógrafa ha participado en más de sesenta exposiciones individuales y colectivas en diversos Museos, galerías, universidades a nivel nacional e internacional. Sus fotografías han sido publicadas en varios diarios nacionales como Unomásuno, suplemento cultural Sábado, La Jornada Semanal, Reforma. En la edición 46 del Festival Cervantino 2018 expuso El hogar y el mundo. Fotografías de la India, en la Universidad de Guanajuato, Sala El Atrio. A propósito de estas imágenes conversamos con ella. 

La India es enigmática. ¿Cuál fue tu primera impresión, qué puedes registrar de este país y de sus mujeres?

Muy compleja tu pregunta, antes que nada no me importó observar calles sucias a primera vista. Sino la multiculturalidad donde se hermanan numerosas culturas, me llamó la atención sus mujeres, estas mujeres que no sólo son hermosas, cada una en sus atuendos muestran tanta variedad, asimismo mi curiosidad en el poder que tiene su mirada, en ella puedes percibir su seguridad. Esa seguridad que se veía también en aquellas mujeres más pobres, tú podías verlas sentadas en el suelo pidiendo algo, vendiendo o tal vez descansado. Con esto quiero decir que existe una evidente desigualdad, el otro extremo que encontré fueron mujeres muy bien colocadas socialmente, son de una posición económicamente ricas, muy ataviadas de pulseras, joyas, accesorios y de saris de seda.

Fui en invierno. Todas estas mujeres estaban muy bien vestidas, sean pobres o ricas portaban saris, unos textiles finísimos, lana. Mostrando siempre seguridad de lo que quieren a dónde van. Evidentemente fue una primera impresión que fui averiguando dependiendo de dónde me encontraba y de a quién yo podía entrevistar o retratar. Lo que sucede ahí es una cultura de Castas, tan múltiples, poque hay cinco niveles, no soy experta en la cultura de la India pero sí me di cuenta que ellas saben su destino, está ahí, en la Casta, y no lo cambian. Por eso, noté que viven felices con su cultura, ese espacio, lugar donde les tocó nacer y vivir, esto fue lo que también me llamó primero la atención.

 

Estar tan cerca de ellas, ¿qué enfatizarías?

Efectivamente hay un gran machismo que permea y además está muy debajo del agua, dicen que hay mucho respeto, efectivamente, tú caminas por las calles como fotógrafa, con la cámara muy grande,y te da miedo; yo tenía miedo de pronto y me di cuenta de que nadie te toca. Nadie te falta al respeto y no te roban, entonces tú crees que así es todo, pero no, por debajo del agua los hombres son violadores, hay violencia en la casa. Estas mujeres sufren en su casa, pero es algo por lo que ellas no se van a revelar, no como en otros países; es algo que lo sienten como un destino, lo que te decía al principio, algo predestinado está ahí en sus vidas y no lo van a cambiar. Entonces, estos movimientos sociales que ahora están por todos lados en manifestaciones, algunos en movilizaciones femeniles y feminista, ellas no lo viven tanto, tampoco lo sé de cierto, pero en general no es un país que se revele. Su gente es muy obediente en cuanto a lo que les toca vivir. Eso lo pude ver y percibir en estos hombres, efectivamente yo iba acompañada por mi esposo (Andrés de Luna), entonces aprecié mucha tranquilidad. Sé que las mujeres cuando están solas sufren, y hay mucho por hacer, en lo personal. Este viaje a la India me marcó, porque antes de ir a la India era otra Norma Patiño, ahora me doy cuenta que ya no puedo ver la vida igual. Estas mujeres a mí me impactaron por su belleza, sus coloridos, sus vestimentas, en cuanto a sus movimientos, su forma de mirar, su forma de ser de ver la vida te marca y quiero hacer algo por ellas. Esta situación del dominio masculino es aterradora.

Lo que hice fue retratarlas y acercarme mucho en cuanto lo que puedes hacer con una cámara, acercarme a su espíritu, a su vida, a su mirada, porque yo hago retrato. Tú sabes que el retrato es un género que requiere considerable aproximación a la identidad de la persona, a su identificación, es decir, ¿quién eres? ¿A qué cultura perteneces? Por supuesto, ¿qué persigues en la vida? El retrato te tiene que decir muchas cosas y por eso es muy difícil. Me acerque mucho a ellas y creo que logré retratos urbanos bastante interesantes para esta exposición.

Platícanos de la exposición Desde la India, ellas nos miran.

Te platico, surge por un Congreso de Género, Primer Congreso Internacional de Género en la Universidad de Tlaxcala, y fui invitada, me hicieron un catálogo y sólo aparecen mujeres, pero tengo otra exposición que se hizo en Cuajimalpa donde ya aparecen también hombres, vacas, perros, changos, es decir, otros personajes. Y fui a Varanasi, una de las ciudades más fuertes que casi nadie resiste, en el marco del Festival Cervantino 2018 expuse fotos de ahí con otros expositores y pudieron apreciar a estas mujeres, lugares, la vida cotidiana en la India.

 

¿Qué formatos trabajaste para esta exposición?

El formato es a color, porque yo trabajo fotografía en blanco y negro, pero no pude sustraerme a la sorpresa que me dejaba ver este colorido y vaya que pertenezco a una cultura colorida como es la mexicana, pero no se compara. Ahí, observamos un recargamiento, un barroquismo no me quise sustraer a esta sorpresa a maravillarme de la cultura india. Sí tengo una serie en blanco y negro que no he expuesto, la he expuesto por mi cuenta de Instagram.

 

¿Norma Patiño cierra esta serie o todavía hay una más con el tema de mujeres?

Sí, habrá otra serie de mujeres porque todavía tengo muchas que no sean expuestos y habrá exposición posiblemente en la Universidad Autónoma Metropolitana, campus Xochimilco, si hay la posibilidad en otros espacios estaré encantada porque ésta es una exposición que está disponible y ha sido muy exitosa, la he llevado a la Casa de la Cultura de Tlalpan.

 

Tu nuevo libro de Retratos, ¿puedes darnos un avance?

Actualmente estoy preparando algo sobre artistas mujeres, sobre el tema de la violencia, en contra de la violencia, porque me metí muy profundamente al contenido de las mujeres a partir de la India. Por eso, a partir de mi viaje mi vida profesional es otra, entonces lo que hago es retratar mujeres haciendo una obra donde están creando una arma contra la violencia, esa es la propuesta, yo les digo a mis retratadas artistas, créame en este momento una obra o pieza, como un arma contra la violencia, entonces ellas hacen todo con su cuerpo, con sus manos, muestran obras de ellas mismas y es una serie perfomática. Soy muy ambiciosa y quiero que sean cien, ahorita llevo veinte, pero la idea es hacerla en grande.

Puros retratos de mujeres y ampliarlo a los hombres porque la experiencia me ha dejado también que ellos desean participar haciendo una pieza contra la violencia de género; entonces, es una obra que se llama Cuerpo y violencia, el arte femenino de hoy y son Mujeres contra la Violencia de Género, es decir, una violencia que se vive en cualquier otro de los géneros. La violencia contra los hombres, porque son hombres, la violencia de los travestis, la violencia de la diversidad.

 

Las nuevas formas de hacer fotografía

Me encanta, soy muy abierta por mi formación en la Escuela Nacional de Artes Plásticas, ahora orgullosamente Facultad de Artes y Diseño, entonces mi manera de ver es súper abierta, open mind dirían, estoy feliz que los hombres y las mujeres se manifiesten en su sexualidad en su diversidad sexual , entonces, soy absolutamente fan de la gente que sea feliz con lo que es y me molesta que haya violencia y predeterminaciones, etiquetas, no me gusta, me auno a estas manifestaciones si es todo referente al arte. No soy experta en política, en sociología.

 

¿Exposiciones próximas?

Sí, tengo una en el Futurama, es una Colectiva con gente de la Universidad, expongo una serie de retratos de personas que viven en el pueblo de Huamelula, Oaxaca son personalidades dentro de su comunidad maravillosas, retratos con sus vestimentas, altares; las mujeres tienen sus altares dan un testimonio de su vida, mi trabajo fotográfico es dedicado a la Fiesta Patronal del pueblo, una fiesta muy importante de San Pedro por la cual dedican toda su vida, todo el año se dedican hacer preparativos para la fiesta. Fiesta de San Pedro Huamelula, Oaxaca son fotos que voy a exponer y probablemente tenga una exposición en marzo de 2019 ese mismo tema, pero ya en una exposición individual, se está gestando.

¿Norma Patiño programa sus series o se deja llevar por su estado sensitivo'

Definitivamente me siento mejor cuando tengo un proyecto planeado con citas, con amigas que son artistas, o también hombres, para llegar a sus casas a retratarlos en la relajación y la confianza. Eso me da mucha seguridad, porque yo no soy fotógrafa de la calle, por eso no soy fotoperiodista. Me gusta construir, eso soy, fotógrafa de fotografía construida. Cuando me gustan mucho las ventanas, esa mirada a las ventanas que te dan posiblemente una historia de una familia, una vida, eso me encanta, he estado penetrando a esas casas a esas personas, familias a través de sus ventanas; también observo cómo han tratado a sus ventanas, cortinas, persianas, herrajes, ahí, ya me dice mucho de estas identidades urbanas. Sin dejar el retrato. No lo puedo dejar, en otros momentos hice desnudo, pero no es mi momento para el tema del cuerpo. Tengo una mujer performancera que me posó desnuda diciéndome «en mi cuerpo muestro las fronteras o los límites de la violencia», la tomé y me encanta. Siempre atenta de la defensa y respeto de las individualidades e identidades.

 

¿Qué es para la académica la fotografía y qué puede compartir a nuevas generaciones y a sus alumnos?

La fotografía para mí es todo, es mi forma de expresión, la forma a la que yo me acerco a todas las personas. Tenía una amiga que me decía; «me inhibe tu mirada», ¿por qué? «Porque ya siento que me estás retratando, o sea, ya me estás viendo el ángulo». Es una herramienta fundamental en nuestra cultura Occidental y Oriental, en nuestra cultura contemporánea y difícilmente va a dejar de hacerlo mientras existan nuevas tecnologías. Yo soy muy moderna, me gusta mucho la tecnología, aprendo rápido, como además soy maestra, mis alumnos me ilustran. Mis alumnos están con su teléfono haciendo fotos y grabándome, yo nada más les digo «no abusen, les doy libertad» y, sí les digo que tengan mesura.

 

*Norma Salazar. Doctora en Letras por la FFyL. UNAM. Investigadora literaria, ensayista, poeta. Autora de tres libros de poesía Cantos Lejanos (La hoja murmurante, 1999), Cuadro al óleo (Ediciones ST, 2005) y Cariátides Mudas (Literatura sin límite de tiempo,2009).

 

 

Fotografías tomadas de: https://bit.ly/2HeH5jM, https://bit.ly/2W2GMfw, https://bit.ly/2FvXxdK.

Revista Desocupado